Durante los estudios del máster, me crucé con un concepto que me llamó particularmente la atención. Siendo yo misma aprendiente de dos idiomas extranjeros, inglés y alemán, leer sobre un concepto que hacía referencia a la lengua extranjera que aprendía y hablaba me pareció cuanto menos interesante. Estoy hablando de la interlengua (Selinker, 1972).